julio 01, 2005

01/07/2005 Fito en San Rafael (Mza)

El apasionado Fito Páez visita por estos días la provincia. El motivo: presentar su último disco, Moda y pueblo. Antes de su llegada, el rosarino ofreció una charla exclusiva con Escenario, desde su estudio en Buenos Aires.

El músico ahora tiene más trabajo que nunca. Un flamante disco en la calle que lo lleva de gira por todo el país, España y Latinoamérica. Está produciendo su segunda película y ya dejó grabado el material que irá en su próximo disco, a editarse el año próximo.

Moda y pueblo tiene temas del propio Páez, de Charly García, de Luis Spinetta, de Litto Nebbia, pero por sobre todo es un trabajo que, con arreglos de Gerardo Gandini, refleja a un Fito íntimo. “Ya no explico por qué hago las cosas porque en verdad ni yo sé por qué las hago”, dijo, excusándose de explicar las razones de esta nueva obra. Mientras que de su nueva película también eligió no decir nada. “Si cuento, todo el mundo saca conclusiones y no quiero dar esa ventaja”, dijo Páez.

Sin embargo, en cuanto al filme, trascendió que tendrá un estilo cercano al de Almodóvar y contará con un presupuesto de 400 mil dólares. Después de Vidas privadas, que fue protagonizada por la ex esposa de Fito Cecilia Roth y el actor mexicano Gael García Bernal, el músico argentino hará su segunda película en tono de comedia.

Además de dirigir, Páez estará a cargo del guión y la producción del nuevo largometraje, en el que actuarán las argentinas Romina Ricci (su actual pareja), Julieta Cardinali y Leonora Balcarce.

–¿Por qué le pusiste Moda y pueblo a tu nuevo disco?

–No me gusta explicar las cosas que hago, porque no son producto de marketing: son ideas. Si querés una explicación, hacé tu propio viaje (risas).

–¿Por qué elegiste a Gerardo Gandini para los arreglos?

–Tenemos un vínculo de muchos años con Gerardo. Es un colega y nos llevamos muy bien, y siempre es un placer trabajar con un amigo. Aparte, creo que es uno de los músicos más grandes de este lado del mundo y me da mucho placer trabajar con él. Con Gerardo trabajamos las canciones sin presiones de ningún tipo, y después de tantos años “cocinando”, resultó que un tipo de la jerarquía de Gerardo estaba trabajando sobre la mejor música popular, el mejor cancionero argentino. Y no hablo por lo mío, sino por la música de Nebbia, Charly, Spinetta. Eso conforma una cosa muy fuerte estéticamente. Convocar a un artista de la envergadura de Gerardo representa también gran parte del pasado y del futuro, porque maneja un lenguaje de una modernidad insólita, y a la vez volver a revisar música de artistas populares de Argentina que tienen una calidad extraordinaria.



Lo que le pasa a Fito

–¿En qué te basaste para elegir el repertorio de este disco?¿Te pusiste alguna premisa?

–No tuve premisas. Las premisas son de los publicistas o de los políticos. Nosotros (los músicos) no somos gente así, no tenemos ese pensamiento. ¿Entendés? Uno va cocinando elementos… Un día la salsa te da un gusto, un día te da otro. Yo no sé por qué hago las cosas ni su origen, simplemente sé que toman algún cuerpo en algún momento y me dan ganas de mostrarlas. Pero me muevo sin premisas.

–¿No analizás lo que hacés?

–No, nunca lo hago. Tal vez con el tiempo tenga una visión más crítica de las cosas. Pero me cuesta mucho explicar lo que hago. Además, hay tantos charlatanes últimamente que hablan y hablan sobre todo y ni siquiera saben qué les pasa a ellos… A mí me da un poco de pudor.

–Y a vos, ¿qué te pasa?

–A mí me pasa que yo disfruto mucho haciendo lo que hago y eso también es intrasferible (risas). Eso también es de uno.

–El concierto en Mendoza, ¿cómo será?

–El disco tiene 10 canciones y grabamos 20 temas. La lista total tiene 25 canciones y vamos cambiando y agregando músicas nuevas.



Dos proyectos

–¿Estás trabajando en tu segunda película y en tu próximo disco?

–La película esta “cocinándose”. Ya inicié los trámites para que el instituto (INCAA) me dé el crédito y supongo que, con un poco de suerte, estaremos filmando en el verano, en Rosario. El disco nuevo está casi hecho y supongo que lo lanzaré después de la película.

–¿Y de qué trata el guión?

–Mirá: si te cuento de la película, no la vas a ir a ver después (risas).

–Adelantáme algo…

–No. Eso paso con Vidas privadas. Me preguntaban, y yo contaba. Es una comedia, es lo único que te puedo decir, porque sino todo el mundo ya sabe lo que piensa de la película: “Es una película de tal y tal y tal, y entonces va a tratar de tal y tal y tal”. Y no quiero dar esa ventaja esta vez.

Gema Gallardo
Diario Uno.