agosto 16, 2007

Fito mostró a Rodolfo (Diario: La Razón, 16/08/2007, Ar)


Con motivo de los 15 años de MuchMusic, el músico rosarino ofreció un show intimista, en el que presentó su nuevo CD, "Rodolfo" —aún no está a la venta— y repasó los hits de su carrera. Entre los invitados estuvo Vicentico.

POR JAVIER FIRPO

Ahí está Fito... Con ese andar desgarbado, zigzagueante, con movimientos eléctricos de esos brazos que parecen aspas, y esa porra enrulada que se mueve acompasadamente...

En una velada más bien de tono íntimo, anoche el músico rosarino actuó en La Trastienda para presentar su última creación discográfica: "Rodolfo", que aún no está en las disquerías. Y lo hizo en el marco de los quince años de MuchMusic.

Cerca de las 20.30, Páez subió a una gran tarima donde lo esperaba un Kawai, su piano laqueado que suplantó al "ya viejito" Steinway. Saco oscuro, remera verde que dibujaba una incipiente curva a la altura del abdomen y un jean gastado. Saludó, sonrió, tomó asiento y musitó: "¡Enjoy!". El primer tema fue "Si es amor", de su flamante disco. Trascartón, siguieron "Al lado del camino" y el siempre bienvenido "11 y 6".

De "Rodolfo" señaló que es "un tratado de amor", apreciación acertada, ya que varias letras hacen hincapié en sentimientos íntimos ("Si es amor"), en desencantos ("Mágica hermosura"), en reflexiones sobre la vida ("El cuarto de al lado"); también hay un espacio para homenajear a Rosario ("Vas conmigo"), y no falta un tributo al Flaco Spinetta, Litto Nebbia y Charly García ("Gracias"), "de quienes aprendí todo".

Hubo dos invitados: el primero fue Pity Alvarez (de Intoxicados), hacedor de una de las versiones más desgraciadas que se escucharon de "Cable a tierra". Quizás así fue ensayado (¿fue ensayado?), tal vez Pity pretendió establecer "su" versión, lo cierto es que la mayoría de los presentes fruncían el ceño como quien huele un alimento vencido.

Hubo tiempo para que Fito charlara, ya que la velada formará parte del ciclo "Intimo e interactivo", que MuchMusic emitirá en septiembre. "Soy feliz en el escenario, simplemente porque me puedo expresar. Acá arriba me pasan un montón de cosas y el cuerpo las asimila", expresó Páez, una mezcla de Tim Burton y Charly García. Respecto de cómo fue la elaboración del CD, manifestó: "Las canciones fueron apareciendo como un impulso y fui fiel a esa sensación. Es verdad que yo estaba enloquecido, terminando de mezclar la película ("¿De quién es el portaligas?"), pero son todas actividades que me dan plenitud. ¡De qué me voy a quejar!". El tema amor sobrevoló el salón, ya que en "Rodolfo" está omnipresente. "Es algo extraño el amor. En realidad, uno no sabe bien de qué está hablando. Yo creo que (el amor) es algo de un gran poderío, y estoy convencido de que el verdadero no se reclama. Pensar que se mata y se muere por amor". ¿Qué no debe faltarle a una canción para decir "ya está"? "Es vital que me caliente". En esta suerte de tertulia, también surgió el tema hijos: Fito tiene dos. "La verdad, a mí no me cambiaron la vida. No creo en esa frase hecha. Lo que sí hicieron fue transformarla y confirmarme un montón de cosas".

Quedaba un buen rato musical en el cual recordó a uno de sus decanos, Charly García, y entonó "Desarma y sangre". Luego, y tras un bello preámbulo en piano, cantó "Tumbas de la gloria" y se animó, a capella, a reversionar "Yo vengo a ofrecer mi corazón", con la que dejó en evidencia su limitada voz. En el punto más agudo, se hizo presente la Ley de Murphy, cuando una copa de vino se estrelló contra el piso. El final, pasadas las 22, tuvo alto vuelo: primero, un prolijísimo Vicentico cantó una bella versión de "Giros" y el telón se bajó con la contagiosa "Mariposa Tecknicolor". Punto y frase final: "Esto de tocar a solas con un piano me encantó. Me parece que con la banda no va más".