Un bello dueto en una noche para el recuerdo

Mercedes Sosa y Fito Páez cantaron en el cierre de la Fiesta de la Manzana.
La velada final de la 37º edición del evento fue el pasado sábado cuando, por tercer año consecutivo, la cantante folklórica se sumó al festejo.

General Roca > Durante cinco días una serie de espectáculos que convocaron a 400 mil espectadores fueron parte de la 37º edición de la Fiesta de la Manzana, que llegó a su fin el pasado sábado. Siguiendo la línea de las presentaciones, el plato fuerte de la velada fueron los recitales que brindaron Mercedes Sosa y Fito Páez.
La cantante folklórica, que por tercer año consecutivo se subió al escenario mayor del evento- se presentó a las 22. Iba vestida con un poncho rojo –atuendo que es tradicional para la intérprete- y dio comienzo a un show en el que su extenso repertorio contó con el apoyo de un coro emocionado compuesto por el público presente. Entre otras canciones, Sosa interpretó las clásicas: “La Masa”, “Simple Chacarera”, “Serenata para la tierra de uno”, “Todo cambia”, “Solo le pido a Dios” y “María, María”.
Cerca de las 23, llegó el momento más emocionante de la noche. El público ansiaba poder escuchar a la emblemática voz del folklore junto al creador de uno de los himnos que tiene el rock nacional. Fito Paez subió ovacionado al escenario para acompañar a la Negra Sosa con “Dale alegría a mi corazón”.
Antes de que Sosa y Páez cautivaran al público, el grupo Aymamá, integrado por Paola Suárez, Florencia Giammarche y la roquense Mora Martínez brindaron a los espectadores un recital. Y el público respondió con aplausos a las folkloristas que participaron en Cosquín.

El turno del rock
Después de Sosa, a las 23.30, le tocó el turno al rosarino Fito Páez para hacer cantar a los presentes. Junto con Coki y Los Killer Burritos -su banda- el cantautor presentó su último trabajo “No sé si es Baires o Madrid” – que ya es Disco de oro-. En la placa recorre temas que se transformaron en clásicos del repertorio del compositor y que pudieron ser escuchados en la noche roquense como son: “11 y 6”, “Ciudad de pobres corazones” y “Mariposa tecnicolor”.
El broche final a la velada se lo puso un juego de fuegos artificiales que iluminaron la noche.