Fito Páez se encumbra en Tajín

Gabriel Medina/ Enviado
PAPANTLA, VER.— Con su música llena de optimismo y poesía Fito Páez dejó más que satisfechos a unos mil jóvenes, adolescentes y adultos que se dieron cita el pasado jueves en el Nicho de la música de la Cumbre Tajín, para ver su esperada actuación.

El músico rosarino sorprendió con su energía y buen humor a un público sediento de cultura y buena música, que durante el día acudió a talleres tan diversos como la elaboración de productos de mimbre, pintura sobre camisetas, dulces típicos, danza y hasta bodypainting.

Algunas personas acudieron al show con camisetas alusivas a la música y nombre de Páez hechas por ellos mismos, lo que encantó al pianista, guitarrista y cantante de 46 años, que no se pronunció al respecto, pero señaló sonriente a quienes las portaron.

Entre olores a vainilla, coco, incienso y cerveza, el argentino ofreció su corazón como sacrificio a su fiel público que coreó algunos de sus éxitos más sonados como Al lado del camino.

Tercer mundo fue uno de los temas más rockeros de la noche y en éste, muchos de los presentes empuñaron una guitarra imaginaria que tocaron como Jimmy Page, ya que este tema incluye un largo extracto de Heartbreaker, tema de Led Zeppelin, banda de la que fue parte aquel músico.

El baile carnavalesco llegó con Circo beat, que la gente danzó con alegría mientras inmortalizaban el momento con la cámara de video de sus teléfonos celulares.

“Muchas gracias, che”, dijo Páez mientras algunos de sus seguidores le hacían reverencias como si fuese la deidad argentina de la música.

Ciudad de pobres corazones fue antecedida por un pronunciamiento de Páez que desconcertó a la gente presente.

“Buenas noches Montevideo”, dijo provocando caras de extrañeza para luego continuar: “Buenas noches Seattle, buenas noches La Paz, buenas noches París, buenas noches Madrid, buenas noches Tajín, ¡carajo!”, terminó ocasionando la risa de cientos de personas.

Las teclas del piano fueron tocadas con sentimiento y pasión por Páez durante varios temas como Taquicardia, de su disco Giros (1985). En A rodar la vida el también cineasta pudo ver desde su escenario un par de banderas argentinas, algunas mexicanas y hasta una uruguaya.

Naturaleza sangre hizo vibrar a la gente gracias a la guitarra de Fito y otros dos músicos que lo acompañaron en este instrumento, además de un bajista y un baterista de primer nivel.

Tráfico por Katmandú fue coreada por la mayoría de los presentes, quienes posiblemente encontraron un paralelismo entre la exótica capital de Nepal y las pirámides de Tajín. Las parejas se abrazaron durante Te vi, como recordando el día en que se conocieron, y muchos grupos cantaron mientras brindaban con una cerveza Dos día en la vida.

Páez no pudo dejar fuera de su repertorio Dar es dar y Mariposa tecknicolor, que fueron coreadas no sólo por el público sino por parte de su staff y hasta algunos de los fotógrafos presentes.

“Ciao, hasta la próxima, salud, dinero y amor”, expresó emocionado Páez antes de irse y recibir a cambio una sobredosis de aplausos.
Con su actuación en el Nicho de la música, el argentino complació a cerca de mil personas, que corearon uno a uno sus temasPAPANTLA, VER.— Con su música llena de optimismo y poesía Fito Páez dejó más que satisfechos a unos mil jóvenes, adolescentes y adultos que se dieron cita el pasado jueves en el Nicho de la música de la Cumbre Tajín, para ver su esperada actuación.

El músico rosarino sorprendió con su energía y buen humor a un público sediento de cultura y buena música, que durante el día acudió a talleres tan diversos como la elaboración de productos de mimbre, pintura sobre camisetas, dulces típicos, danza y hasta bodypainting.

Algunas personas acudieron al show con camisetas alusivas a la música y nombre de Páez hechas por ellos mismos, lo que encantó al pianista, guitarrista y cantante de 46 años, que no se pronunció al respecto, pero señaló sonriente a quienes las portaron.

Entre olores a vainilla, coco, incienso y cerveza, el argentino ofreció su corazón como sacrificio a su fiel público que coreó algunos de sus éxitos más sonados como Al lado del camino.

Tercer mundo fue uno de los temas más rockeros de la noche y en éste, muchos de los presentes empuñaron una guitarra imaginaria que tocaron como Jimmy Page, ya que este tema incluye un largo extracto de Heartbreaker, tema de Led Zeppelin, banda de la que fue parte aquel músico.

El baile carnavalesco llegó con Circo beat, que la gente danzó con alegría mientras inmortalizaban el momento con la cámara de video de sus teléfonos celulares.

“Muchas gracias, che”, dijo Páez mientras algunos de sus seguidores le hacían reverencias como si fuese la deidad argentina de la música.

Ciudad de pobres corazones fue antecedida por un pronunciamiento de Páez que desconcertó a la gente presente.

“Buenas noches Montevideo”, dijo provocando caras de extrañeza para luego continuar: “Buenas noches Seattle, buenas noches La Paz, buenas noches París, buenas noches Madrid, buenas noches Tajín, ¡carajo!”, terminó ocasionando la risa de cientos de personas.