agosto 28, 2010

Fito Páez conquistó de nuevo a Santiago


En un Teatro Caupolicán repleto, el argentino Fito Páez presentó al público santiaguino su nuevo álbum, Confiá (2010), en el quinto concierto de la mini gira que el artista realiza este mes por nuestro país, y que tuvo a su compatriota y ex pareja Fabiana Cantilo como gran sorpresa, quien abrió el show del músico y luego lo acompañó en un par de temas.

Junto a su guitarra, Cantilo apareció en escena pasadas las 21 horas para interpretar algunas piezas de su repertorio, como “Ya fue” de 1995, además de homenajear a Charly García con “Eiti Leda”, tema que el rockero compuso para su ex grupo Serú Girán. Los problemas de sonido y algunas dificultades para cantar por parte de la compositora impidieron una mejor presentación y fue aplaudida mesuradamente por el público que a esa altura ya repletaba el recinto de calle San Diego.

Completamente vestido de blanco y abrigado con una bufanda gris, Fito Páez subió al escenario secundado por la joven banda que lo acompaña últimamente en vivo, compuesta por tres guitarristas, un bajista, un baterista y dos tecladistas. Con una linterna para alumbrar su rostro y asegurando al público que éste era el concierto más largo del año, el argentino inició su show con “Fuera de control”, seguida por “Folies Verghet”, incluida en el desconocido álbum La la la (1986), que el músico grabó junto a Luis Alberto Spinetta.

En su nuevo álbum, el oriundo de Rosario aconseja la creencia en las propias cualidades, en confiar. Y esa misma confianza en su trabajo se vio demostrada en el repertorio elegido para el concierto, en el cual combinó arriesgadamente lo mejor de Confiá con verdaderos himnos de su trayectoria, canciones que ya son parte de su fanaticada fiel y que llevan a Paéz a expresar que sus shows en Santiago cada vez “son más hermosos”.

Entre lo nuevo y lo viejo, entre lo actual y lo pasado. Así se desarrolló la presentación del argentino, quien no dudó en interpretar la inolvidable “El chico de la tapa”, alargar con la balada “London Town” y regalar de inmediato “11 y 6″ a la galería; o sacar desde Rey Sol (2000) la enérgica e indomable “El diablo de tu corazón” y continuar con la práctica “La ley de la vida”. El show también permitió ver nuevamente a una inquieta Fabiana Cantilo en el escenario, esta vez para cantar junto a Páez “Fue amor”, seguida por “Brillante sobre el mic”, esta última tal como en el disco En la vereda del sol (2009) que la compositora grabó junto a otros destacados artistas trasandinos.

La última parte del concierto estuvo llena momentos majestuosos, como las coreadas “Un vestido y un amor” y “Al lado del camino”; el recuerdo a Gustavo Cerati, a quien Páez le envió “un abrazo grande, porque lo necesita”; la dedicación de “Polaroid de locura ordinaria” a una chica del público; el desenfreno habitual que significa “Ciudad de pobres corazones”; y los trapos al aire -con fanáticos incluso sin polera- en la intensa “A rodar mi vida”, con la que el argentino finalizó su presentación.

De vuelta del receso, “Giros”, que a confesión del músico fue el tema que interpretó la primera vez que vino a Chile, llevó al recuerdo de los primeros años solistas de Páez, quien siguió con “Dar es dar” acompañado por Cantilo . Finalmente, cuando se cumplían las dos horas y media de show, “Mariposa tecknicolor” cerró la presentación del argentino, que una vez más exhibió su brillantez musical y demostró que arriba de escenario la confianza le sobra.