agosto 27, 2010

Lo MEJOR ALLÍ ! FABI CANTILO!

Fito Páez exorcizó Santiago y envió buenas vibras a Cerati

El argentino se presentó ante unas cinco mil personas en el Teatro Caupolicán.

Calificó como un "lujo" compartir escenario con la sensual Fabiana Cantilo.
Fito Páez estrenó en vivo en Santiago canciones de su disco "Confía" además de recorrer sus grandes éxitos, en un show que resultó ser una suerte de catarsis colectiva frente a los problemas cotidianos.
Fue una jornada que calificó como "una noche inolvidable" en la que tuvo palabras para su compatriota Gustavo Cerati, quien sigue en grave estado de salud.
Bien avanzado su concierto en la capital chilena y antes de interpretar "La rueda mágica" envió "un beso y un abrazo a Gustavo, que lo necesita", palabras que sacaron aplausos entre las alrededor de cinco mil personas que acudieron al Teatro Caupolicán.
Fabiana Cantilo, a quien Páez calificó como una invitada de "lujo", fue la encargada de abrir los fuegos, enganchando de inmediato con el público, pese a los continuos problemas de sonido que se producían entre su guitarra acústica y su micrófono, al punto que ella misma en medio de una canción señaló "se acopla, se acopla" mirando hacia los técnicos y luego volteando nuevamente hacia la gente explicó que estaba enviando "un mensaje".
Pero los molestos desperfectos técnicos que a otros hubiesen sacado de quicio, para ella -enfundada en una camisa, chaqueta de terciopelo azul y jeans- pasaron a segundo plano con las palmas espontáneas que surgían en cada una de las cuatro canciones que puso en escena, entre ellas una "del amigo del bigotes colorados", en alusión al ex Serú Girán Charly García y el tema "Eiti Leda", un clásico de la banda que también integró Pedro Aznar.
Fue una propuesta arriesgada en la que dejó afuera a hits como "Mi enfermedad" o "Mary Poppins y el deshollinador", y optó por otros de corte más íntimo como "Destino marcado".
Fito y sus mensajes de esperanza.
Cuando el reloj marcaba las 21:26 horas del jueves, llegó el turno del rosarino, que linterna en mano se enfocaba el rostro mientras cantaba junto a su banda "Living in the city", corte de su último disco "Confía", del cual también interpretó, entre otras, "Tiempo al tiempo" y el tema que da nombre a su nuevo trabajo, y cuyo subtexto era un presagio del mensaje que trajo a Chile: "El mejor momento está por venir" como remarca uno de los pasajes de esa canción.
"El chico de la tapa" vino en siguiente término y pese a lo saturado del sonido fue largamente coreada, para luego entonar "Llueve sobre mojado" ya con una pulcra puesta en escena, al igual que "11 y 6", y "Circo beat".
El concierto también tuvo momentos especiales como el pasaje en que un solitario Fito Páez interpretó "Cable a tierra" frente al piano. Luego apareció Fabiana Cantillo, quien en algunos momentos sirvió de corista, pero ahora lo acompañó en "Fue amor", tema en el que ambos intercambiaron coqueteos.
"Cuantas noches me hiciste sufrir", señaló el rosarino mientras ella estaba cruzada de piernas sobre el piano, con su escotado y corto vestido negro. "Lo mismo digo", indicó ella.
La banda nuevamente tomó posiciones y todos juntos entonaron "Brillante sobre el mic", mientras Cantilo hacía la segunda voz y por momentos corría por el escenario como una niña jugando a ser un avión, antes de retirarse por un momento.

"El mundo de hoy" -de "Confía", fue un pausa en medio de canciones antiguas como "Naturaleza sangre", "Tumbas de la gloria", "Un vestido y un amor" y "Al lado del camino".
El rock se desató con Páez en la guitarra en "Ciudad de pobres corazones", y sus interminables y potentes acordes de guitarra.
El remate
"A rodar mi vida", fue el último tema que entonó y contagiado por el público que movía al viento sus chaquetas y poleras o lo que fuera, él lanzó hacia atrás la bufanda que lo acompañó gran parte de la jornada.
Tras una pausa de algunos minutos volvió al escenario con Fabiana Cantilo, y ya sin su traje blanco, y en cambio con blue jeans y chaqueta rosada. "Giros", "Dar es dar", "Mariposa teknicolor", marcaron la despedida en la que Fito agradeció la oportunidad de "alegrar corazones", eso cuando ya eran las 23:44 horas y llegó el momento del adiós definitivo.